Perdonad que empiece... por el final:
"El recurso a las figuras de autoridad también refuerza la parodia de la ciencia con la que trabajan los periodistas titulados en humanidades, ya que, con ello, se reúnen todos los ingredientes para la misma: la ciencia consiste entonces en la formulación de una serie de enunciados sobre la verdad, tan didácticos como incomprensibles y carentes de base, pronunciados por unas arbitrarias figuras de autoridad que no están sujetas al control de la elección popular."
Y es que me parece que sirve para resumir muy bien este capítulo y reflejar las opiniones concretas de Goldacre al respecto. Después de haber dado caña a colectivos como homeópatas, "detoxificadores", nutricionistas acientíficos, científicos que no publican sus malos resultados, farmacéuticas que se enriquecen y hacen sobre todo marketing, ¡les llega al turno a los periodistas de ciencia! Ya solo quedan los bomberos ;) jejeje
Me parece (perdonad que meta mi opinión por el medio) que Goldacre hace un análisis incisivo y dice verdades como puños, pero queda todo enturbiado por las generalizaciones:
"Mi hipótesis básica es la siguiente: las personas que dirigen los medios de comunicación son titulados en áreas de humanidades con escasos conocimientos sobre ciencia, que, además, se enorgullecen de su ignorancia en la materia."
Ignoro cuál es la situación en Reino Unido, pero no puedo evitar que se me vengan a la cabeza proyectos como Next o Ballena Blanca, y que por lo tanto me parezca una generalización un tanto injusta. El mismo Goldacre reconoce que está un pelín obsesionado con el tema como se desprende de la cantidad de entradas que ha dedicado en su blog a denunciar la situación.
Mi profesor de física se tomaba a guasa el título periodístico que pusieron a su investigación. |
El capítulo continúa ejemplificando que muchas veces lo que aparece como CIENCIA en un medio, no es ciencia ni mucho menos, sino publicidad encubierta (Historias descabelladas: tanto dinero para nada), opiniones de gente que no es científica ("Todos los hombres tendrán miembros grandes"), o supuestos estudios para validar lo que se quiere contar ("Jessica Alba tiene el contoneo perfecto según un estudio").
Otro caso (relativamente reciente) de malinterpretación de un estudio científico |
La causa no está solo en el desconocimiento científico de los periodistas, y el autor usa el caso de la medicina moderna para explicar que en ciencia los grandes beneficios vienen de avances pequeños y progresivos. [INCISO: esto me ha recordado a las respuestas a la Pregunta Naukas 2015]. La verdad es que los periodistas de ciencia no lo tiene fácil porque
"la ciencia misma funciona muy mal como noticia"y además existe el peligro de dar cobertura a lo novedoso, que tal y como funciona la ciencia
"hay que ser muy insensatos para arriesgar nuestras vidas basándonos en un conjunto aislado de datos inesperados que se contradicen con los conocimientos ya establecidos".
(¿Alguien más ha pensado en los neutrinos superlumínicos?)
Pero estas dificultades, no excusan que los periodistas contribuyan a generar y dar peso a un estereotipo de los científicos como "cerebritos" y a la ciencia como un saber provisional y variable. Cuando esto último puede ser cierto para ciertas áreas de la ciencia, pero hay conocimientos científicos descubiertos por ejemplo por Arquímedes que siguen teniendo validez hoy en día. Además, los periodistas no saben interpretar las estadísticas, dan cobertura a estudios SIN PUBLICAR, y no saben diferenciar entre EVIDENCIA e HIPÓTESIS (¿verdad verdadera o insulto gratuito?). Para rellenar las deficiencias en su manera de interpretar la ciencia, se recurre a figuras de autoridad, e incluso para crear un equilibro: a desacuerdos, reales o no, entre la comunidad científica.
En fin, como ya se me ve el plumero..., no estoy segura de si me ha gustado este capítulo, así que me encantará que destripéis este resumen y me hagáis re-pensar todas las cuestiones que se tratan :)
Yo había pensado proponer para el debate, un par de puntos:
1) Goldacre critica que los periodistas rebajen el nivel de la ciencia para hacerla asequible al lector medio. ¿Os parece una reducción necesaria, o bien, algo que habría que corregir? Aquí me encantaría contar con la opinión de esas personas de humanidades, sobre todo, de gente de la disciplina de comunicación.
(Por cierto, Molinos nos recomienda su artículo: Ciencia y periodismo, una relación a construir)
2) Muy relacionada con la pregunta anterior, Goldacre menciona que solo la ciencia sufre esta reducción en el nivel, frente a la economía, la literatura, etc. ¿Os parece que la ciencia en comunicación sufre una especie de discriminación positiva con respecto a otras disciplinas en cuanto al rigor? Si la respuesta es sí, ¿os parece justificado/injusto/lo que sea?
Y ya está. Espero que propongáis muuuuuchas más cuestiones de debate en los comentarios, y que me tengáis ocupada este fin de semana ;)